Después de un fin de semana frío y lluvioso, comenzamos el mes de marzo con un post deco lleno de ideas para poner en práctica una tendencia decorativa que, si bien nació a principios del siglo XX, hoy está más de moda que nunca: las paredes de ladrillo.
Su textura se integra a la perfección tanto en los estilos más rústicos como en los más clásicos, permite jugar con los colores para conseguir resultados más suaves o más industriales (natural, pintado de blanco, de colores…), y aporta mucha personalidad a cualquier parte de la casa. Vamos a verlo…
En el salón:
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En el comedor:
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En la cocina:

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En el hall de entrada:
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En los baños:
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En el dormitorio:
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En las habitaciones infantiles:
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Mis favoritos: en el salón, en la pared enfrentada al sofá, y en el dormitorio, en la pared sobre la que se apoya la cama ejerciendo de cabecero por sí sola.
¿Vosotros incorporaríais esta tendencia en vuestras casas?
¡Buen martes! :)
La cama queda preciosa con la pared así, aunque, un cabecero de cama siempre viene bien. No solo va a decorar la casa con un mejor aspecto que la propia pared, también le añade un plus de comodidad a la cama. Decorar es cuestión de gustos, aunque no recomendamos pegar la cama a la pared, siempre recomendamos usar un cabecero de cama.
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