Menudo día raro estamos teniendo hoy por aquí… Me he despertado bien temprano con un sol radiante, me he vestido de entretiempo como pocas veces podemos (¡con playeros de tela!), y a medio día ha llegado el diluvio. El cielo comenzó a cubrirse, se volvió cada vez más gris, y en un visto y no visto se ha puesto a llover. Y yo que no pasaré por casa hasta entrada la noche, no quiero ni pensar en la tarde que me espera de charcos y Converse…
Y para compensar lo feo que se ha puesto el cielo, un post deco que tenía preparado desde hace algún tiempo. Ya sabéis que prefiero colores neutros en los elementos estructurales y generales, para posteriormente dar personalidad y color a través de la decoración. Pues bien, uno de esos elementos indispensables que nos puede aportar la personalidad y el color que le falta a una estancia son los cojines.
Grandes o pequeños, cuadrados o rectangulares, en colores pastel o flúor, lisos o estampados, bordados o serigrafiados… Cualquier opción es buena si sabemos combinarla adecuadamente, pero la verdad es que me gustan mucho las decoraciones con muchos cojines. Aquí os traigo una selección de mis favoritos.
Un lugar clásico en el que siempre hemos visto muchos cojines es en los dormitorios. Y aunque hay quién dice que es muy incómodo estar quitando y poniendo cojines todo el rato, a mi me compensa con creces lo bonito que hacen.

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Y la fiesta multitudinaria de cojines llegó a los sofás. Os expliqué aquí que hay pocos sofás que me gusten de verdad y que en general, con elementos que por volumen tienen bastante protagonismo en el salón. Mi opción favorita (y por la que he optado en mi casa) es un sofá muy sencillo en un tono neutro (preferiblemente gris) con muchos cojines que le aporten esa belleza que a él le falta. Si queréis aportar una nota de color, perfecto. Y si queréis mantener la neutralidad, podéis jugar con diferentes texturas y estampados dentro de la misma gama.

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Y por supuesto, si tenéis un sofá de color los cojines también son una opción perfecta, aunque en ese caso habrá que prestar más atención a la combinación de colores empleada para que no desentone con el color del sofá. En este caso, los cojines de colores resaltan aún más que en los sofás neutros.

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Si os apetece llenar una estancia de color, es también la opción perfecta. No carga demasiado, permite muchísimas combinaciones y opciones distintas que podemos variar fácilmente, y si nos cansamos no hay más que cambiar las fundas y listo.

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Y otro de mis espacios favoritos decorados con cojines son las habitaciones infantiles. En este caso creo que además de jugar con las gamas y colores, es importante incorporar también las formas: conejos, monstruos, súper héroes, animales… combinados con cojines cuadrados o rectangulares hacen una decoración perfecta para sus camas o rincones de lectura, como podéis ver más abajo.

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Yo me he apuntado a esta tendencia tanto en los dormitorios como en el salón, aunque en este último caso estoy tardando en encontrar lo que busco: cojines distintos y especiales que combinen con los que ya tengo (dos negros y uno amarillo que tuve claros desde el principio). Éste y éste son firmes candidatos a ocupar alguno de los puestos, pero busco algunos más. ¿Alguien me recomienda? :)
¡Que tengáis un buen fin de semana! Yo tengo planazo: ruta a caballo por la playa. :)